sorprendiendo a pajero

sorprendiendo a pajero
Hace como 3 años ya tuve la suerte de vivir una buena y morbosa experiencia.
Una buena tarde de domingo, estando aburrida en casa, decidí salir a pasear por el rio de mi ciudad, es una zona muy grande y bonita, donde la gente va a correr, sacar a los perros o simplemente fumar porros.
Me puse los auriculares, un calzado cómodo y salí a caminar.
Me sorprendió que no hubiese mucha gente, aunque seguramente estaba casi desértico por ser el inicio del verano y todo el mundo huye a la playa.
Decidí al rato acalorada sentarme a la sombra en un banco que había en una zona apartada . Al quitarme un momento los auriculares para desenredarlos escuché detrás de mi el crujir de hojas, me giré y descubrí que había alguien detrás de unos arbustos altos, la cabeza de un hombre asomaba escondiéndose rápido al ver que le estaba mirando.
Mi primer pensamiento fue ” vaya, otro pajero” Es bien sabido que todas las mujeres hemos tenido que aguantar a varios pajeros a lo largo de nuestra vida, así que no me sorprendí. Miré a mi alrededor y vi que no había completamente nadie , ni siquiera a lo lejos. Estaba yo ahí sola con un tio que se estaba pajeando detrás mio.
Lo normal hubiese sido levantarme e irme sin hacerle caso, pero pensé:” No, alguien se esta pajeando pensando en ti, tienes el derecho a ver como lo hace”
Volví a mirar y ahí seguía escondido, miré a lo lejos a ambas direcciones y seguía sin aparecer un alma.
Me quedé mirándole esperando que se dejase ver mas y me di cuenta que esa situación tan morbosa me estaba excitando.
Me atreví a decir :” Hola”, para que supiese que me había cerciorado de su presencia, asomó un poco la cabeza y le dediqué una sonrisa.
Decidí que lo iba a acompañar y metí mi mano bajo el pantalón para tocarme. Para mi sorpresa se guardó la polla y se acercó haciendo como que paseaba por ahí mirándome.
Se sentó en el banco de al lado sin decir nada y yo seguí tocándome y mirando hacia otro lado ignorándole.Escuche como me preguntaba ” como te llamas?” Y le miré y le di un nombre falso : ANA.
Me sorprendió porque no era muy mayor, como mucho le daría 40 años y fisicamente estaba bastante bien.
Me dijo :” Mira Ana” y volvió a sacarse el rabo que lo tenía durísimo y además bastante grande. Me puse muy muy muy cachonda, tanto que pensé que tenia que dejarme montar por el. Volví a mirar a ver si había gente, seguíamos solos, así que bajé mis pantalones hasta las rodillas abriéndome y acariciando mi clitoris, le puse cara de puta y se animó a sentarse a mi lado, se quedó mirando mi coño mientras se pajeaba muy rápido.
No me decía nada, solo se escuchaban nuestras respiraciones fuertes y seguía mirándome desencajado .
le pregunté: ” te gusta?” Y empezó a asentir como un loco, le volví a preguntar:” lo quieres tocar?” y rápidamente acercó una mano mientras con la otra seguía sacudiéndosela a lo bruto.
Con un dedo acarició suave mi clitoris que dicho esto es bastante grande. Ahora ya no había vuelta atrás, no tenía condones encima y le había calentado la polla a ese tio, si decidía metérmela tendría que dejar que lo hiciese a pelo.
Por desgracia y para mi sorpresa vi como empezaba a respirar muy fuerte y como de su rabo empezaba a salir leche disparada .
Se quedó tal vez como 6 minutos mas viendo como yo me seguía tocando, sin hablarme ,sin tocarme, solo mirando. Tenia la esperanza de que se le volviese a poner dura , volvía repetirle la pregunta:” te gusta?
Asintió muy serio, vi como acercaba su cara a mi coño, creía que me lo iba a comer, aparté la mano para que lo chupara y me quedé alucinada cuando lo único que hizo fue pegarme un escupitajo de saliva enorme.
Se apartó y siguió mirando sin decir nada, eso me puso a 100, y enseguida me llevé la mano al coño y empecé a hacerme un dedo introduciendo su saliva en mi, en menos de un minuto me estaba corriendo como una loca.
Después de eso un par de risas, un “vaya, esto no me lo esperaba” Y al percatarse de que se acercaban unos chicos en bici aprovechó para levantarse y con un frío adiós se despidió y me dejó allí.
Esa experiencia me encantó , volví otros domingos a la misma hora por si le volvía a ver, pero no, eso si, desde ese dia decidí que nunca mas volvería a ignorar a un pajero.

Bir yanıt yazın

E-posta adresiniz yayınlanmayacak. Gerekli alanlar * ile işaretlenmişlerdir